Sin embargo, al aparecer agentes comercializadores particulares que inicialmente pagaron precios superiores a los de la FederaciĂłn, se tuvo que desechar la idea de continuar con el programa de comercializaciĂłn. A partir de entonces, la organizaciĂłn se constituyĂł en organismo de presiĂłn con el propĂłsito de mejorar los precios del grano.
En 1965 ante la necesidad de constituir un departamento tĂ©cnico que apoyara el fomento del cultivo del cacao y ante la escasez de recursos, ya que el sustento de la agremiaciĂłn lo constituĂan las escasas cuotas de afiliaciĂłn y los auxilios del gobierno, se decidiĂł pedir al Congreso de la RepĂşblica la creaciĂłn de la cuota de fomento cacaotero, representada en un aporte obligatorio del 2% sobre el valor de las ventas del cacao, con destino directo y especĂfico a la FederaciĂłn Nacional de Cacaoteros.
Sin embargo, al aparecer agentes comercializadores particulares que inicialmente pagaron precios superiores a los de la FederaciĂłn, se tuvo que desechar la idea de continuar con el programa de comercializaciĂłn. A partir de entonces, la organizaciĂłn se constituyĂł en organismo de presiĂłn con el propĂłsito de mejorar los precios del grano.
Dicho propósito se logró mediante la Ley 31 de 1965, lo que permitió fortalecer los programas de fomento y asistencia técnica.
Dicho propósito se logró mediante la Ley 31 de 1965, lo que permitió fortalecer los programas de fomento y asistencia técnica.